Un termo eléctrico es un depósito de una determinada capacidad, en el que el agua se calienta gracias a una resistencia y se mantiene así por los materiales aislantes con los que está construido. Su reducido precio lo convierte en una opción nada despreciable para suministrar el agua caliente necesaria en el hogar.
Este gráfico muestra los precios medios de Termos Eléctricos de las 4 marcas con mayor cantidad de artículos. 163 € es el precio medio más alto de las 4. La marca de Termos Eléctricos con precios más bajos es Teka
CataCointraOrbegozoTeka
50€100€150€200€
Ventajas del termo eléctrico
No necesita ningún tipo de instalación. Al tratarse de un aparato eléctrico, un enchufe es suficiente.
No es necesario esperar a que salga agua caliente: nada más abrir el grifo disfrutamos del agua que está a la temperatura adecuada en el depósito.
Por lo mismo, la temperatura del agua es constante.
No necesita un caudal mínimo de agua: funciona sea éste cual sea.
Inconvenientes del termo eléctrico
Se trata de un electrodoméstico de gran tamaño, por lo que es necesario tener un espacio suficiente para su instalación.
Además, tanto la pared como los anclajes deben ser lo suficientemente fuertes como para soportar el peso del aparato más el agua que guarda en su interior.
Si se llega a terminar el agua caliente en el depósito, es necesario esperar horas hasta que dispongamos de una cantidad significativa de agua caliente otra vez.
Funciona con electricidad, uno de los suministros más caros en la actualidad.
En el caso de fuga o reventón, puede provocar una inundación en casa.
Otros aspectos que debemos tener en cuenta
El consumo medio de agua caliente en España ronda los 30 litros por persona y día: esto debe darnos una pista sobre la capacidad del termo que necesitaremos para garantizar un correcto suministro en el hogar, aunque no es definitivo.
El tamaño y las costumbres de la familia resultan claves a la hora de adquirir el aparato: una familia con niños pequeños necesitará más capacidad que una formada solo por dos adultos. Por otro lado, necesitaremos un termo más grande si preferimos los baños a las duchas o si fregamos a mano en vez de utilizar el lavavajillas, por ejemplo.
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