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Blog / Deshidratar un alimento: ¿cómo hacerlo paso a paso?
Deshidratar un alimento es más común de lo que parece dentro de los hogares hoy en día. Y es que, producto del ajetreo del trabajo, los estudios o las diversas actividades que tenemos en nuestra rutina diaria, buscamos maneras de conservar los alimentos y facilitar su uso posteriormente.
La deshidratación de alimentos es un proceso a través del cual se elimina la mayor parte del contenido de agua presente en un alimento, con el objetivo de prolongar su vida útil y conservar sus propiedades nutricionales.
En este artículo conseguirás un paso a paso de cómo deshidratar un alimento y los beneficios que este tipo de procedimiento brinda a tu día a día. Así como los productos de este tipo que podrás conseguir en La Casa del Electrodoméstico.
Si eres de las personas a las que les preocupa la sana alimentación de su familia, debes saber que deshidratar los alimentos es la mejor opción. Los alimentos deshidratados conservan casi todos los minerales y vitaminas presentes en ellos, durante mucho más tiempo.
Entre las razones más comunes por las que se procede a deshidratar un alimento están las siguientes:
Al eliminar el agua, se dificulta la proliferación de bacterias, levaduras y moho, los cuales necesitan humedad para crecer. La deshidratación de alimentos ayuda a preservarlos por períodos más largos sin la necesidad de refrigeración o congelación, evitando la descomposición y el deterioro.
Los alimentos se vuelven más livianos y compactos una vez se elimina el agua, lo que facilita su transporte y almacenamiento. Esto es especialmente útil en situaciones de camping, senderismo o viajes donde el espacio y el peso son limitados.
Al reducir el contenido de agua, se minimiza la actividad de las enzimas y se ralentiza la oxidación de los nutrientes. Esto ayuda a prolongar la vida útil de los alimentos deshidratados, permitiendo que se conserven durante meses o incluso años, también dependerá un poco del tipo de alimento y las condiciones de almacenamiento.
Aunque algunos nutrientes se pierden durante el proceso de deshidratación de un alimento, muchos otros se conservan en mayor medida. Deshidratar un alimento puede ayudar a retener vitaminas, minerales y antioxidantes presentes en los mismos, proporcionando una fuente de nutrientes concentrados y saludables.
Los alimentos deshidratados son muy versátiles y pueden ser utilizados de diversas formas. Se pueden rehidratar para recuperar su textura y sabor originales, o utilizarse en forma de polvo o trozos secos para añadir sabor y nutrientes a diversos platos.
Es importante que tengas en cuenta que, deshidratar un alimento es un método eficaz para conservarlo. Por otro lado, es necesario cumplir ciertas pautas de seguridad alimentaria y almacenamiento adecuado para evitar la proliferación de bacterias y asegurar su calidad a largo plazo.
Se pueden deshidratar los alimentos que contengan en su composición un alto porcentaje de agua. Para deshidratar un alimento, puedes seguir los siguientes pasos:
Al comenzar el proceso para deshidratar un alimento, el primer paso consiste en lavar y cortar el alimento en rebanadas finas o trozos pequeños. Puedes optar por pelar o dejar la piel, dependiendo del alimento y tus preferencias. A continuación encontrarás dos formas muy prácticas que te ayudarán en la deshidratación:
La forma más natural de deshidratar un alimento es colocarlo bajo la exposición del sol o al aire libre. Para obtengas resultados satisfactorios con este método debes:
Dependiendo de los factores previamente mencionados, la deshidratación de los alimentos puede tomar varios días e incluso semanas.
Si tienes fácil acceso a un deshidratador de alimentos, será una forma muy rápida y sencilla de conseguir los resultados que deseas. Para este tipo de electrodoméstico solo debes:
Si te llama la atención este tipo de artículos, te recomendamos Sogo FRE-SS-10130. Este producto lo podrás conseguir en nuestra tienda a un precio muy competitivo.
Durante el proceso de deshidratación de los alimentos, verifica constantemente la sequedad de los mismos. Deben estar firmes, sin humedad ni viscosidad y al doblar un trozo debe quebrarse, esto te permitirá saber que el alimento está suficientemente deshidratado.
Una vez que los alimentos estén completamente deshidratados, déjalos enfriar por completo antes de almacenarlos en recipientes herméticos o bolsas con cierre hermético.
Por otro lado, asegúrate de que no haya humedad residual para evitar la formación de moho. Asimismo, es recomendable etiquetar los recipientes con el nombre del alimento y la fecha de deshidratación del mismo.
Recuerda, deshidratar un alimento puede requerir tiempos y temperaturas ligeramente diferentes, por lo que es importante investigar específicamente sobre el alimento que deseas someter a este procedimiento. Además, ten en cuenta las recomendaciones de seguridad alimentaria y sigue las instrucciones del fabricante si utilizas un deshidratador de alimentos.