Cómo alargar la vida útil del frigorífico

El tiempo de funcionamiento de un electrodoméstico es un factor importante, ya que nos indicará cuánto va a durar. El frigorífico es de los más usados en el mundo y su duración es un elemento muy importante. En este sentido es bueno saber cómo alargar la vida útil del frigorífico para saber como extender su durabilidad mediante el cuidado y mantenimiento idóneos.

Como norma general, un refrigerador dura entre los 10 y los 16 años, algo ventajoso teniendo en cuenta que funciona constantemente 365 días al año. Pero, si lo usamos mal y no realizamos un buen mantenimiento, su funcionamiento se puede reducir considerablemente.

vida útil del aparato

Trucos y consejos para cuidar y alargar la vida de tu refrigerador

Temperatura: entre los 4 ºC y 5 ºC

Tener la temperatura adecuada para conservar los alimentos es esencial y el nivel de funcionamiento del frigorífico disminuirá o aumentará, provocando que el esfuerzo que haga el aparato varíe. Es importante encontrar un equilibrio que mantenga los alimentos en buen estado y, a la vez, conseguir una mejor eficiencia. Normalmente, lo ideal es entre los 4 y 5ºC.

Más frío no es sinónimo de una mejor conservación de los alimentos, ya que, si estos no están en la temperatura adecuada, pueden acabar en mal estado. Además, si el refrigerador está muy lleno, es mejor bajarlo un par de grados para que los alimentos mantengan una buena temperatura.

No abras tanto la puerta

Un error usual que comete la gente es dejar la puerta de la nevera abierta mientras decide qué quiere cocinar. Se estima que esto puede generar una pérdida de frío de hasta el 7%.

Así que es recomendable que, antes de abrir la puerta de la nevera, tengamos claro qué es lo que queremos sacar y asegurar así un buen mantenimiento. Y es que, al abrir la nevera, sale el aire frío y entra el caliente, haciendo que el motor tenga que trabajar más para mantener la temperatura óptima del termostato.

Revisa las puertas

Las juntas son las encargadas de mantener el aire frío en el interior. Por eso, es importante que estén limpias y en buen estado, de lo contrario tendrás que reparar las gomas del frigorífico. Si se dañan, la nevera trabajará más ya que tiene que mantener la temperatura.

Frecuentemente, hemos de buscar zonas dañadas para evitar fugas y garantizar que sellen bien. Para limpiar las juntas, usamos una bayeta con limpiador de superficies y secamos al momento. También se puede aplicar vinagre para evitar la aparición de moho.

Ubicación

Antes de comprar un refrigerador, tenemos que tener claro dónde queremos ubicarlo. Lo primero, es asegurarnos de que el lugar escogido no esté cerca de fuentes de calor como la vitrocerámica o el horno, así como que la temperatura ambiente sea moderada. Así mismo, hay que dejar unos 10 cm de distancia entre el serpentín y la pared para que el motor respire.

Igualmente, hay que evitar tumbar el frigorífico, ya sea porque se acaba de comprar o por una mudanza. Hay que transportarlo en vertical y que nunca tenga una inclinación superior a 40ºC, ya que el aceite en su interior se moverá de sitio y tendremos que esperar 12 horas antes de poder volver a enchufarlo.

Mantenlo nivelado

Una forma de que el motor no trabaje más es intentar que el frigorífico esté nivelado. Si no es así, entonces tendremos problemas para que la puerta se mantenga cerrada de forma hermética.

Cuando hay una fuga en la puerta, el aire se escapa haciendo que el motor funcione más para bombear aire frío extra.

Para saber si está recto, podemos cerrar la puerta y dejar pillado un folio a la altura media del frigorífico. Si el papel se mantiene, significa que está bien sellado, pero si cae o se puede extraer fácilmente, entonces existe un espacio por donde sale el aire y se ha de limpiar el sellado, cambiarse o volver a nivelar el aparato.

comida en la nevera

Interior del frigorífico

Los frigoríficos necesitan tener algo dentro para mantener la temperatura baja. Si no se suele llenar mucho, se puede dejar una jarra con agua dentro. Sin olvidar que el interior tiene que estar limpio.

  • Lo primero es desenchufar la nevera antes de usarla y vaciarla por completo.
  • Se retiran los cajones y baldas y los lavamos con agua caliente y jabón. Se limpia el interior del frigorífico con un producto especial y hasta el último recoveco.
  • Si se desea usar productos naturales, una solución es mezclar agua con bicarbonato (o vinagre) y añadir unas gotas de limón para eliminar cualquier olor.

No llenar demasiado la nevera

Tener la nevera llena nos gusta a todos, pero si lo miramos en términos de rendimiento, esto es algo negativo.

Es debido a que los productos pueden obstaculizar los conductos que expulsan el aire dentro del frigorífico y que no haya espacio para que el aire frío llegue a todas partes.

No metas comida caliente

Al colocar comida caliente en el frigorífico, el aparato sufre una rápida subida de temperatura, ya que está programada para mantener siempre la misma temperatura. Pero si se mete comida caliente, esto hará que tenga que trabajar más el motor y tener mayor consumo.

Organiza correctamente los alimentos

Aparte del esfuerzo extra del frigorífico para poder enfriar todo el interior, también influye la forma en que estén colocados los alimentos.

Colocando correctamente carnes, verduras, bebidas y lácteos se evita que los olores y sabores impregnen a otros alimentos. Para evitar esto, los frigoríficos cuentan con baldas, cajones y espacios en la puerta.

Como recomendación, se considera bueno dejar 3 cm entre cada alimento y situar en la parte superior del frigorífico los productos que se consumen más a menudo y colocar carnes, frutas y verduras en la parte inferior (parte más fría). La puerta, al ser más cálida, puede contener productos como mermeladas, salsas o huevos.

cómo colocar los alimentos

Exterior del frigorífico

La limpieza exterior del aparato ha de realizarse con bastante frecuencia para que la superficie no se llene de manchas o cambie de color (en caso de ser blanco).

Para limpiarlos, se usa un trapo de microfibra, agua y jabón neutro. Así mismo, no podemos olvidarnos de la parte trasera del frigorífico, ya que el polvo puede provocar que el aparato no funcione a toda potencia.

Limpiar también los tubos, la rejilla y la zona en torno al motor cada 6 meses y nunca olvidarse de desconectar el frigorífico mientras se realizan las tareas de mantenimiento y limpieza.

Limpieza del frigorífico

En 2010 un estudio sobre higiene en el hogar demostró que cerca del 40% de los hogares contienen alto niveles de moho y bacterias en la nevera. Aparentemente, estaban limpias, pero mediante un análisis detallado se descubrió que disponían una gran acumulación de microorganismos que pueden afectar a los alimentos guardados en ella y, por ende, a la salud.

El frigorífico es uno de los lugares más queridos por los hongos y bacterias por lo que necesita ser limpiado y desinfectado casi constantemente.

Ya hemos comentado cómo limpiarla más arriba, pero también es recomendable eliminar los malos olores que pueden acumularse o proliferar en el interior. Pero podemos evitarlos aplicando algunos trucos:

  • Colocar un limón partido por la mitad con clavos.
  • Un recipiente con bicarbonato para absorber los malos olores.
  • Guardar los alimentos de forma hermética para evitar que desprendan olores.

Limpiar las bobinas

Tenemos que mirar alrededor del frigorífico, sobre todo en la parte posterior, para comprobar donde está la zona de las bobinas. Estos serpentines del condensador tienen la función de mantener la nevera en funcionamiento y con eficiencia energética. Cuanto están sucias, es necesario limpiarlas. Se puede realizar una vez o dos al año para mantener el aparato en óptimas condiciones

Hielo: elimínalo con frecuencia

Si las paredes del frigorífico tienen más de 0.5 cm de hielo, hay que eliminarlo. Si no lo hacemos, obligaremos al motor a funcionar y gastar más. Eso sí, nunca hay que recurrir a raspar el hielo ya que podríamos dañar elementos del aparato.

Bandeja de goteo y el orificio de drenaje

En el refrigerador guardamos alimentos susceptibles de descomponerse. Estos generan agua, bacterias y otros desechos que se condensan y acumulan en ciertas zonas como son las bandejas de goteo, orificios de drenaje y otros conductos del aparato.

Si no se limpian a tiempo, pueden causar daños en estas zonas y causar manchas o generar bacterias que perjudicarán a los alimentos que están en la nevera. Para evitar esto, se han de limpiar en profundidad con productos desinfectantes para eliminar los malos olores y preservar la salud.


Video - Cómo alargar la vida útil del frigorífico

¿Cuáles son las comprobaciones rutinarias que debes realizar en tu frigorífico?

Hay elementos del frigorífico que, con el tiempo, tienden a desgastarse por lo que es importante vigilarlos y, si es necesario, cambiarlos. Algunos de ellos con las juntas de goma de la puerta.

Otra comprobación rutinaria es hacia los filtros de agua, los cuales se recomienda su revisión cada 6 meses, ya que es el tiempo que suelen durar en perfecto estado y nos ayuda a evitar futuros problemas como son la acumulación de sal, moho y que aparezcan malos olores.

Esperamos que con estos consejos revises los elementos de este aparato para lograr alargar la vida útil de tu frigorífico.