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En nuestro hogar contamos con numerosos electrodomésticos que usamos, muchas veces, a la ligera sin prestar atención a su gasto energético. Sin embargo, conocer su consumo es una buena manera de ahorrar energía y mejorar la sostenibilidad. Además, es sencillo llegar a saber cuáles son los electrodomésticos que más consumen.
El gasto energético de un electrodoméstico está ligado a varios factores, incluidos el tamaño, el tiempo de uso y la eficiencia energética.
En este sentido, las nuevas tarifas eléctricas y el precio alto de kWh, así como la nueva discriminación horaria, hace que nos planteemos formas y modos de ahorrar energía.
En este post te vamos a contar cuáles son los 10 electrodomésticos que más consumen y cómo conseguir reducir el gasto energético de cada uno de ellos.
Es posible calcular el gasto energético de un electrodoméstico de forma fácil. Basta con la fórmula sencilla que te contamos a continuación:
Energía consumida = Potencia eléctrica x Tiempo de utilización
Además, también podemos usar un vatímetro o, lo que es lo mismo, un medidor de consumo eléctrico que nos ayudará a calcular la potencia empleada en cada electrodoméstico de forma individual. Este aparato nos determinará qué consumo de energía tiene cada uno durante cierto periodo de tiempo.
También conviene tener en cuenta el consumo de electrodomésticos en standby que repercuten en la factura de la luz.
Tanto la Organización de Consumidores y Usuarios como el IDAE, han señalado qué electrodomésticos tienen un mayor consumo energético y consejos para reducir el gasto. En general, algunos de los electrodomésticos que más consumen son la nevera (662 kWh/año), el congelador (563 kWh/año), la televisión (263 kWh/año), la lavadora (255 kWh/año), la secadora (255 kWh/año) y el lavavajillas (246 kWh/año).
La nevera es el electrodoméstico que más consume energía. Esto no es debido a su alto consumo en potencia, sino al tiempo de uso, ya que suele estar encendida 24 horas al día los 365 días al año. Puede llegar al 22% de consumo eléctrico del hogar ya que gasta hasta 662 kWh anuales. Si se apuesta por la eficiencia energética, consumirá menos de 200 kWh al año.
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Como en el caso de la nevera, el congelador es un aparato que se ha de utilizar todos los días del año. Por lo tanto, puede llegar a representar casi el 20% del consumo energético del hogar. Más específicamente gasta 563 kWh que se podrían recudir si se acude a la eficiencia energética.
Es nuestro tercer producto del ranking, ya que gasta en torno a 255 kWh anuales. Al contrario que la nevera o el congelador, la lavadora gasta más debido a la potencia del propio electrodoméstico. Si utilizáramos una lavadora con clase A en eficiencia energética, podríamos reducir el consumo de la lavadora de este aparato en 180 kWh anuales. Además, cuenta con programas interesantes para ahorrar energía.
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Este electrodoméstico genera un 8.3% del gasto energético en la vivienda, aunque su utilización es mucho mejor si se compara con lavar a mano los platos. Esto es así ya que no solo gasta electricidad, sino también agua. Y lavar a mano supone un mayor gasto de agua. Se estima que gastamos 30 litros de agua menos usando un lavavajillas que empleando el método manual.
Si utilizamos ciertos programas del lavavajillas, la factura de la luz se puede recudir incluso un 20%.
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Las secadoras tienen un gran gasto de energía debido a su propio funcionamiento y muchas veces no es necesario utilizarlas. Es decir, se puede ahorrar si tendemos la ropa en tendederos al sol. Los expertos recomiendan solo utilizarla cuando sea imprescindible (situaciones de clima frío/lluvia o por contaminación si se vive en zona urbana).
Es uno de los aparatos más destacados para los amantes de la cocina y podemos encontrarlos con una alta eficiencia energética. Se estima que puede incluso consumir la mitad que un horno viejo.
De media, un horno supone un 8.3% de la electricidad que se gasta en la vivienda y se pueden aplicar consejos y trucos para reducir el consumo.
Si nos vamos al campo de la tecnología, la televisión es uno de los electrodomésticos que más sube nuestro gasto energético. Tan solo con encender la televisión o dejarla en standby podemos gastar energía.
De media, los españoles gastamos más de 3 horas y media de televisión al día, o que supone un gasto energético de hasta el 12%.
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Con la irrupción de las nuevas tecnologías y formas de empleo como el teletrabajo han hecho que los ordenadores cobren más protagonismo en los hogares. Es importante apagar estos aparatos para evitar que sigan gastando, incluso si los dejamos en standby.
Según los expertos, consume hasta un 7.7% de energía en el hogar, por lo que no es algo que tengamos que dejar pasar a la ligera. Así mismo, también los periféricos suponen un incremento del gasto, por lo que es mejor apagarlos también.
La vitrocerámica es uno de los electrodomésticos que más consumen en términos absolutos. Nada más y nada menos que 2.200 kWh. Es más, en función del plan energético contratado es conveniente no encender demasiados aparatos al mismo tiempo si se va a cocinar.
Lo bueno es que se emplean solo a la hora de cocinar, por lo que no supone un gran incordio. Se estima que los españoles gastamos una media de 6 horas/semana. Esto hace que represente un 15% del gasto total de los electrodomésticos del hogar. Una forma de ahorrar es usando una placa de inducción.
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El microondas gasta de media lo mismo que un horno (de 800 a 900 kWh), pero los primeros son capaces de calentar platos de forma más rápida y eso explica que sean cada vez más usados. En el peor de los casos, consume 7% del total de los electrodomésticos.
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Una vez que hemos visto la lista de los electrodomésticos que más consumen en nuestros hogares, nos toca hablar ahora de cómo conseguir ahorrar en consumo energético al utilizarlos.
– La nevera. Tenemos que evitar exponerla a fuentes de calor como el horno o la calefacción, ventilar bien la parte trasera para que se mantenga limpia y a pleno rendimiento, no dejar la puerta abierta más de lo necesario, así como regular la temperatura según las necesidades de los alimentos. Esto nos ayuda a ahorrar hasta un 25%.
– Lavadora. Lo recomendable es lavar las prendas con agua fría (30ºC) o usar el programa Eco, llenar la lavadora al máximo y realizar un mantenimiento adecuado de forma periódica.
– Lavavajillas. Se recomienda cargarla al máximo y utilizar programas eco o con baja temperatura. También podemos utilizarlo mejor por las noches si tenemos una tarifa con horario nocturno.
– Secadora. Siempre es mejor secar la ropa al aire, pero si no podemos, podemos aprovechar para centrifugar la ropa al máximo empleando la lavadora y así emplear menos la secadora. Como en lavavajillas, podemos usarlo de noche con tarifa nocturna.
– Horno. Es mejor optar por hornos de convención, puesto que realizan una mejor distribución del calor. Así como evitar abrir la puerta durante su funcionamiento y apagar el aparato antes de terminar de cocinar para aprovechar el calor residual.
– Televisión. Los modelos LCD consumen menos que los plasmas y es mejor no dejar el aparato en standby, así como ajustar el brillo y el contraste y escoger el tamaño que mejor vaya con nuestras necesidades (el tamaño también contribuye al gasto).
– Ordenador. Para ahorrar, podemos bajar el brillo de la pantalla, apagarlo en lugar de dejarlo en standby, desconectar los periféricos (impresora, altavoces, teclado, etc.) y utilizar una pantalla LED.
– Microondas. Se estima que puede consumir tanto como un horno, aunque se utiliza menos tiempo y más rápido, por lo que podemos encontrar formas de ahorrar. Una forma de no gastar tanta energía es ajustar el tiempo de calentamiento al tipo de comida.
Ahora que ya sabes cuáles son los electrodomésticos que más consumen, toma nota y sigue nuestros consejos para conseguir ahorrar en todos ellos. Aún así, recuerda que siempre gastará menos energía aquel aparato con clase energética A o B y también es mejor apagarlos cuando no se necesiten. En general, podemos llegar a ahorrar hasta más de un 20% de consumo energético al mes.
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